«Punto» y «Decrecimiento», dos poemas.
«Punto» y «Decrecimiento», dos poemas.
«PUNTO»
Adiós al orden, ya escribí con métrica perfecta,
mas lo bello está en describir el universo con versos sin norma ni forma uniforme
[que conforme esta absurda realidad deforme,
académicos de la supuesta vida se olvidan de la esencia y sólo ven la referencia,
[ratas sin madriguera.
Dioses no pueden escribir como pobres mortales, ya que son los miedos lo que
[dejas al descubierto en los mejores recitales.
Textos que jamás verán consolación, sólo desolación y estatuas sin alzar.
Olvida la estúpida providencia del sino.
No existirá revolución mientras creamos que las batallas que nos tocan lidiar son
[simple azar.
Ardua tarea definir tu angustia
en manos de un dios ausente.
Ardua tarea definir tu angustia
cuando secos ríos dejan surco.
Ardua tarea definir tu angustia
cuando no entiendes el presente.
Ardua tarea definir tu angustia
en manos de un barco sin rumbo.
Subí a la cima, sentí el frío clima y pregunté a Sísifo
cómo medir la incertidumbre de la vida
cuando la precisión del tiempo es efímera.
La piedra cayó antes de responder.
«DECRECIMIENTO»
Tráeme un folio completamente en blanco.
Vestiré mis mejores galas para
ver este encuentro fortuito en tu palco.
Vestiré metáforas, caerán máscaras.
Cuadernos no verán versos
con semejante fragancia,
con tanta clarividencia.
Quizás lo escupan más bello,
pero no sincero.
Torturé mi ánima,
mas borde silencio
recibí en mi estancia.
Engullí
sílaba,
vomité
cáscara.
Mario Gómez Leal