Alles wird nicht wieder gut. “Un amor”, por Isabel Coixet

por Nov 20, 2023

Alles wird nicht wieder gut. “Un amor”, por Isabel Coixet

por

Un amor

Dirección: Isabel Coixet

Reparto: Laia Costa, Hovik Keuchkerian, Hugo Silva, Ingrid García-Jonsson

Duración: 128 minutos

El viernes 10 de noviembre se estrenó en cines la película Un amor, una adaptación de la novela homónima de Sara Mesa (1976, Madrid), con guión de Isabel Coixet (1960, Sant Adrià de Besòs) y Laura Ferrero (1984, Barcelona), autora de la reciente Los astronautas. Cabe mencionar que la película, dirigida por la propia Coixet, se proyectó por sorpresa el lunes 6 en el festival Alcine 52, en Alcalá de Henares.

La película, al igual que la novela, narra la historia de Nat, una mujer joven que se muda a un pueblo en paradero desconocido para comenzar una nueva vida. Uno de los puntos fuertes es la ambientación desangelada y potencialmente hostil que rodea este nuevo comienzo.

Un amor es, como su nombre apunta, la historia de una pasión, que no debe ser confundida con un sentimiento agradable ni racional. Por ejemplo, tanto en latín como en alemán, la palabra pasión proviene de la raíz de otra palabra que significa sufrir (del latín, passio deriva de patī, sufrir, padecer; del alemán, Leidenschaft, pasión, proviene de leiden, sufrir). Así, la pasión de Nat es inefable e inexplicable. Es una grieta en el tiempo, una posibilidad que se eligió y con cuyas consecuencias hay que lidiar. Es la historia de una caída libre, de una obsesión tormentosa e irracional, que resulta muy incómoda pero también cautivadora por la cercanía en la que ocurre. Lo que resulta interesante de la escritura y del arte en general, es que nos permiten magnificar las premisas, llevarlas al extremo y explorar qué pasaría. Esto, precisamente, es de lo que trata la película.

Un amor ahonda también en la sociedad y el papel que esta reserva a las mujeres. Con reminiscencias de Anna Karenina o La edad de la inocencia, la historia de Nat perfectamente podría ser el relato decimonónico de una sociedad que aún excluye y juzga a las mujeres por su vida sexual, sobre las que pende como lo abyecto el calificativo de “loca” y a las que se domina emocionalmente con el silencio.

De especial belleza es también la elección de la canción principal de la película, Es wird wieder gut (todo va a estar bien) de Max Raabe, protagonista de una escena final que recuerda a la Otra ronda (2020) de Vinterberg (1969, Frederiksberg). No obstante, las connotaciones del significado son distintas y remiten a la melancolía que produce la pérdida del objeto amado, que nos lleva a considerarlo un espacio que habitar: un amor es un hogar. Sin importar si seguimos contando o no con él, el amor es nuestro, la pasión es nuestra; sea lícito o no que la sintamos. Este proceso de pérdida melancólica se observa también en la transformación de Nat, que realiza su particular viaje del héroe.

Adaptar una novela siempre es difícil, y más una tan querida como la de Sara Mesa, por otra parte, caracterizada por un monólogo interior intenso y frecuente, complejo de reflejar en pantalla. Coixet y Ferrero logran transmitir el descenso a los infiernos de la mente de Nat, gracias a la presencia de la protagonista en prácticamente todos los planos, lo que permite al espectador acceder a la subjetividad de la obra, a lo que también contribuye la interpretación de Laia Costa (Barcelona, 1985). Coixet se aleja con esta película de su registro habitual, más sofisticado y en algunos casos algo cursi. Destaca también el empleo de la relación 4:3, que contribuye a crear una sensación de angostura. Ha de tenerse en cuenta, eso sí, que, si bien el filme lidia con una emoción y una pasión intensos, la expresión de estos es más bien intimista. Todo ocurre como en la vida misma, una escena sucede a otra en una acumulación de acontecimientos, no necesariamente relacionados, que pueden dejar en nosotros cicatrices profundas y transformarnos.