Tristana e Isolda I: Prólogo.

por Feb 18, 2021

Tristana e Isolda I: Prólogo.

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Estos poemas conforman el prólogo del poemario-exprés inédito Tristana e Isolda. Una novela del tiempo que no llega.

¿Dónde se ha metido el trovador? ¿Y su laúd?

¿Y cada muerto          por las hazañas de la Patria?

 

La plaza en expectación,

a alguien se le olvidó cancelar el mariachi. Sí,

y el resto es auto-tune, y una fiesta,

una fiesta de auto-tune silente.

―¡Oíd ―entra partiendo el humo―,

escuchad al trovador italiano! (Un grito: Bella Ciao!)

El plano se cierra, el laúd no tiene cuerdas.

(un subtítulo: música silente en tensión)

­­―¡Ved, pues escuchar no se estila,

que en la Corte de Madrid…

El plano. Un sofá en el fondo.

―… Contemplad

los amores de Tristana e Isolda!

El plano. Un sofá en el fondo. Un basium interruptum.

 

Todas las amantes huyen de sus públicos.

Soy Tristana, Tristana la de la fiesta

Si hablase de rosas y de azucenas,

también de la color en vuestro gesto,

oh Donna Angelicata, deshonesto

sería este corazón que cercenas.

0:22

Yo, desde mi sobremodernidad

prefiero hablar de tus pelos de seda,

ásperos, cuando pinchas hacia afuera.

¿No ves que no nos suenan estas rimas?

Amor-amoris, ¿Por qué no me suenas?, su-eñas…

¿Y ese suspiro que enajenas?

Dices: Triste

Yo sé que Suspiras: Tristana.

0:23

Tic azul, tic azul. ¡Responde!

Oye la canción: por qué no me enseñaste cómo se vive

sin ti.

1:34

Azul no son tus ojos. Azul. En tu mundo raro.

Tú me acostumbrasteeeeeeeeee

2:45

Pásate por casa, te dejaste algo que antes solía ser mío.

3:56

Soy Isolda, pero

Pero. Sí que hui contigo. Yo abrí la puerta,

ensillé al caballo (eso dicen, ¿no?),

clavé las uñas, amor,

amor, pero. Pero nos hemos quedado sin piel.

 

Créeme si te digo que ya no tenemos piel,

todavía parece que está ahí, pero.

 

Pero. Sí que subí tus escaleras. Yo abrí todas las puertas,

monté a caballo (eso lo sabes bien),

clavaste tú las uñas, en esa piel

que nos es ausente.

 

Créeme, Tristana. Pero las pieles quedaron ahí,

yo no quiero, pero. No puedo tirar del pellejo. Agrandar la herida.

 

Adiós, Tristana.

Tengo unos planes, compromisos sin peros.

 

Créeme si te digo que, cuando acabe todo,

volverán nuestras pieles.

(Hace 2 días)

Paula Mendieta