La llave de las sombras. “Werewolf by night”, de M. Giacchino

por Dic 7, 2022

La llave de las sombras. “Werewolf by night”, de M. Giacchino

por

Werewolf by night

Director: Michael Giacchino

Reparto: Gael García Bernal, Laura Donnelly, Harriet Sansom Harris, Kik Thatcher, Daniel J. Watts, Eugenie Bondurant, Jaycob Maya, Leonardo Nam, Al Hamacher

Duración: 54 minutos

Werewolf by night es un déjà vu, tanto visualmente, como auditivamente. Le dice a tus sentidos que la recuerdes, que la rescates de alguna otra parte de tu cerebro. Esto se debe a su dirección, pues Michael Giacchino (Estados Unidos, 1967), más conocido por componer bandas sonoras para películas que por dirigir, ha realizado verdaderas obras maestras musicales para otras franquicias importantes de Disney y del panorama pop audiovisual. No es raro que su sello personal, tan ligado a la música, te haya llamado la atención.

En el momento en el que el tema musical de Marvel, tan característico por su homogeneidad durante todos sus productos, es modificado por Giacchino, aportándole ese carácter visceral de las bandas sonoras de las películas de terror clásicas, sabemos que los magnates de la franquicia han depositado en sus manos la mayor confianza: el permiso a la modificación y a la innovación de la marca. Giacchino, desde entonces, marcará una ruptura parcial con el resto de la estética de Marvel. A Giacchino le han dado el poder de abrir una puerta que a ningún otro director de la franquicia le habían dado, la del universo de Marvel Horror.

Ya hemos visto la introducción de personajes de este panorama, como Agatha Harkness, la contraparte de Wanda en la serie Wandavision, o Moon Knight, el cual, de hecho, aparece por primera vez cuando se retoman los comics de Werewolf by night (1972). Aun así, el verdadero comienzo de este universo en pantalla lo marca Jake Russel, nuestro protagonista y hombre lobo, pues con él vemos por primera vez algo que no se recuperaba desde hace cinco décadas en Marvel, el terror clásico y sus monstruos rudimentarios.

Este cambio claro en la presentación impacta de manera inmediata en la narrativa audiovisual que seguía hasta ahora el MCU, ¿es esta disrupción un comienzo en el cambio de discurso de las películas de La Casa de las Ideas? Este producto, aunque participa de la cultura pop, se aleja más de las grandes producciones de Marvel y se acerca más al estilo del cine B de los años 50, de cuya influencia bebe de manera terrorífica (literalmente). Ese cine de bajo presupuesto que pretendía hermanar con lo comercial, pero manteniendo la independencia. Esta clasificación le da mucha más libertad a Giacchino, pues puede hacer una historia pop con personalidad propia.

Entre los elementos del terror de los años 40 y 50 que apreciamos, está el uso del blanco y negro, una declaración de amor (y de intenciones) a estas películas. Además, lo único que se ve en color es la piedra de sangre, lo que podría ser un easter egg sobre la futura importancia del artefacto en la franquicia o una posible conexión con el Darkhold (libro de magia oscura que corrompe a prácticamente todo el que lo usa) y la magia del caos de la Bruja Escarlata, característicamente roja. Esto solidificaría la teoría de que Werewolf by night es la puerta definitiva a Marvel Horror que todos los fans llevaban tiempo esperando poder abrir y cruzar, de ahí su gran recibimiento.

Es notoria también la falta de CGI (animación por ordenador) durante casi toda la producción, que hace que el peso de los efectos especiales recaiga en efectos prácticos, como el maquillaje, las prótesis o el juego de sombras, el cual nos parece tan característico en la transformación de Jake a hombre lobo, dejando claro lo que ocurre sin que tenga que representarse explícitamente, aspecto que ahorra varios miles de dólares en producción y que tanto nos recuerda de nuevo a ese cine B o a esa narrativa tan de cómic; y, sin apuntar a tan grandes rasgos, las pequeñas “quemaduras de cigarro” (término usado en la industria cinematográfica para referirse a las pequeñas motas que aparecen en el marco de la imagen) que aparecen durante toda la duración del especial.

Al no ser historia de origen y comenzar in medias res, no invita mucho a la profundización en las narrativas personales de sus personajes, pero, aun así, marca tan sutiles trazadas, que la psicología de los protagonistas queda dibujada al estilo cervantino, es decir, en pocas líneas. Como dijo Gael García Bernal (Jake Russel) en una entrevista para el medio de prensa Entertainment Weekly, los monstruos pueden llegar a mostrar más humanidad que ciertas personas y héroes, lo que deja una reflexión bastante acertada de lo que nos hace sentir el protagonista según pasa el tiempo y va agotando sus minutos en pantalla.