Las voces de la rabia. “Enrabiados”, de Jorge Volpi

por Jun 8, 2023

Las voces de la rabia. “Enrabiados”, de Jorge Volpi

por

Jorge Volpi, Enrabiados

Madrid, Páginas de espuma

169 páginas, 17,10 euros

A veces, no sabemos qué decir. Otras, hablamos demasiado. Las emociones extremas tienden a impulsar formas de expresividad igual de extremas. Al pensar en la rabia, el tema del nuevo libro de Jorge Volpi (Ciudad de México, 1968), Enrabiados, la cuestión es cómo se ha adaptado a las nuevas formas de comunicar. Las redes sociales, sobre todo, permiten una disociación del discurso en niveles que pocas veces somos capaces de aprehender en su totalidad. Los mensajes son hiperbólicos, unidireccionales, sin matices. Lo curioso es cómo esta nueva situación, por abrumadora, hace pasar por alto otras disociaciones discursivas igual de complejas, también vinculadas al problema: no siempre es lo que se dice, sino lo que se calla. El silencio también puede ser una forma de violencia. La primera virtud que podemos resaltar del volumen de relatos del autor mexicano es cómo explora estas diferentes materializaciones de la rabia.

“Irreversibilidad” abre el libro con una prosa que sigue el hilo de la conciencia del ayudante de Armin Zorn-Hassan, un importante científico e intelectual, que acaba de morir. El narrador es el encargado de escribir el obituario. Leemos el proceso de redacción, las contradicciones que subyacen, las frustraciones. Si bien hay referencias al tema de las redes sociales, pues el difunto era famoso por los rabiosos mensajes que lanzaba al internet, aquí vemos una versión distinta del tema. El texto se centra en el rencor acumulado en el silencio, en lo que no se ha dicho y ya no podrá ser resuelto. En el extremo opuesto se ubica “Transparencia”, cuarto relato del volumen. Por un lado, aborda directamente el tema de las redes sociales, su efervescencia y su cualidad efímera. Por otro, imita un feed de twitter. En lugar de una narración sin puntos y aparte, como en el primer cuento del libro, encontramos expresiones sueltas, de pocos caracteres, pertenecientes a voces diversas y anónimas.

Esta es otra de las virtudes de Enrabiados: experimenta con la forma. Los ejemplos citados arriba no son los únicos. “Fatalidad”, una reescritura de los mitos en torno a la figura de Edipo que ubica la tragedia clásica en la actualidad, presenta distintas voces, cada una con una personalidad formal propia. “Sustenabilidad”, desde cierto punto de vista, el texto más tradicional, evoca la forma de una novela, comprimida para funcionar como un relato largo: la historia de una activista política, su lucha ecológica, su ascenso y eventual caída. “Atonalidad” presenta cuatro historias dentro de un mismo texto, que siguen formas musicales y hablan sobre músicos y sus obsesiones. Por último, “Poética” muestra una cara particular de la autoficción, marcadamente autoparódica, que sirve para reflexionar sobre las formas de violencia que el escritor ejerce sobre lo real y, también, sobre la ficción.

Esta amplia variedad de propuestas formales cumple un objetivo, mostrar cómo la rabia y las emociones a las que está vinculada se mueven en distintos niveles. Los sentimientos extremos no solo producen expresiones igual de extremas, como dije al iniciar. Se construyen sobre un entramado complejo de situaciones y emociones. No es solo la colera, es también la frustración, son los rencores. La única manera de expresar esta densa carga es a través de un discurso igual de polivalente. Los distintos estilos que conforman Enrabiados, hilados en todo momento por un tema y por una búsqueda común, permite mostrar la heterogeneidad del problema. Así, el volumen posee una unidad potente que, al mismo tiempo, no pierde diversidad ni se agota en una primera lectura.